Los hidratos de carbono son un nutriente muy importante para mantener una buena salud. Sin embargo, escoger los menos adecuados puede suponer un importante perjuicio en nuestra salud. En este artículo os hablamos de la relación entre los hidratos de carbono y colesterol.
Relación entre hidratos de carbono y colesterol
Es fácil encontrar información que relaciona el consumo de hidratos de carbono con un aumento del colesterol. Concretamente, se habla de un incremento en la cantidad de LDL o colesterol malo en sangre. ¿Qué hay de cierto en ello?
Hasta ahora no se ha encontrado una relación directa entre la ingesta de hidratos de carbono y un aumento en los niveles plasmáticos de colesterol. El problema viene en que normalmente los alimentos cargados de azúcares también tienen muchas grasas de mala calidad. Estamos hablando de alimentos altamente procesados. En estos alimentos se añaden grandes cantidades de azúcar y grasas para mejorar su sabor. Entre estos alimentos encontramos las galletas, la bollería, pastelería y la repostería industrial.
Muchas veces se recurre a las grasas hidrogenadas por ser mucho más resistentes al enranciamiento. Este tipo de grasas sí que tienen un impacto significativo en los niveles de colesterol en sangre, haciendo que suba el LDL y que baje el HDL. Esto es justo lo contrario a lo deseado.
Escoger los glúcidos correctos te puede ayudar a bajar el colesterol
Por el contrario, en el mercado podemos encontrar multitud de alimentos con carbohidratos complejos e integrales. Estos tienen una gran cantidad de fibra dietética que es muy beneficiosa para la salud. Entre las virtudes que se atribuyen a la fibra está la capacidad para ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL en sangre.
La fibra soluble es capaz de capturar los lípidos de la dieta dificultando su absorción. El colesterol es un lípido, por lo que consumir fibra ayuda a que el organismo sea menos eficiente a la hora de absorberlo. Verduras, legumbres, cereales integrales y fruta son los alimentos más ricos en fibra que podemos encontrar.
Como resumen se puede decir que no hay una relación directa entre los hidratos de carbono y el colesterol, pero si una relación indirecta. Los alimentos cargados de carbohidratos poco saludables lo son también en grasas no saludables, ahí es donde nace la relación indirecta en el tema que nos ocupa hoy.