Las proteínas son una sustancia con una gran importancia que forman parte de todas las células del organismo humano, así como las del resto de los seres vivos que habitan nuestro planeta. La proteína se encuentra en el segundo lugar en cuanto a abundancia dentro del organismo, solo por detrás del agua. Cuáles son las funciones de la proteína en el organismo.
Toda la proteína presente en el cuerpo humano ha sido fabricada por el propio organismo utilizando la proteína dietética que se consume. La proteína se utiliza en muchos procesos vitales y, por lo tanto, debe ser reemplazado de manera consistente. Esto se consigue consumiendo regularmente alimentos que contengan proteínas.

Las principales funciones biológicas de las proteínas son:
Reparación y mantenimiento de estructuras
La proteína se conoce como el bloque de construcción del cuerpo. Se conoce de esta forma a causa de que las proteínas son imprescindibles para mantener las funciones vitales de creación y reparación de nuevos tejidos dentro de los seres vivos. El pelo, la piel, los ojos, los músculos y los órganos están constituidos por proteínas. Es por esto que los niños necesitan más proteínas por kilogramo de peso corporal que los adultos, pues están creciendo y desarrollando nuevos tejidos proteicos de forma mucho más rápida.
Proporcionan energía sí es necesario
La proteína es una fuente de energía importante. En caso de ingerir más cantidad de proteína de las necesaria para el mantenimiento de las estructuras del cuerpo, así como el resto de las funciones imprescindibles para la vida, el organismo vivo las usará como fuente de energía. Si no se necesita a causa de una ingesta adecuada de otras fuentes de energía como los carbohidratos, la proteína excedente se usará para formar nueva grasa y se guardará en las células grasas.
Formación de hormonas
Las proteínas tienen mucha importancia dentro del proceso de creación de varias hormonas. Se trata de sustancias muy importantes para poder controlar funciones del cuerpo que son vitales para el funcionamiento correcto de algunos órganos.
Un ejemplo de ello es la insulina, una proteína de tamaño reducido que se encarga de ajustar el azúcar presente en la sangre, y que para su correcto funcionamiento se ven implicados varios órganos importantes tal como el páncreas y el hígado.
La secretina, es otra hormona formada por proteínas, que podemos poner como ejemplo. Es una hormona que ayuda con la digestión mediante la estimulación del páncreas y el intestino, para de esta forma producir todos los jugos digestivos que se necesitan.
Formación de enzimas
Las enzimas son proteínas que aumentan la tasa de reacciones químicas en el cuerpo. De hecho, multitud de reacciones químicas necesarias para la vida, solo se pueden desarrollar manera eficiente gracias a las enzimas. Por ejemplo, un tipo de enzima funciona como ayuda en la digestión de moléculas grandes de proteínas, carbohidratos y grasas en moléculas más pequeñas, mientras que otro ayuda a la creación de ADN.
Transporte y almacenamiento de moléculas.
La proteína es un elemento importante en el transporte de ciertas moléculas. Por ejemplo, la hemoglobina es una proteína que transporta oxígeno a todo el cuerpo. Algunas veces también se puede utilizar la proteína como medio de almacenamiento de algunas moléculas. Un ejemplo de ello es la ferritina, una proteína que se mezcla junto al hierro para poder guardarse en el hígado.
Creación de anticuerpos
Las proteínas también son fundamentales para crear anticuerpos, los cuales permiten prevenir infecciones y enfermedades graves. Son proteínas que se encargan de identificar y ayudar a las células inmunes a combatir antígenos como las bacterias y los virus. A menudo intervienen junto a otras células pertenecientes al sistema inmunitario. Por ejemplo, estos anticuerpos identifican y luego rodean los antígenos para mantenerlos contenidos hasta que puedan ser destruidos por los glóbulos blancos.